La felicidad es un valor invaluable para los seres humanos, pero también para los animales y plantas.
Cualquier ser vivo que pase largas etapas en un estrés constante termina por colapsar. Llamémoslo "eroción emocional".
Imagínate que trabajas en un entorno de gran competitividad, en un espacio reducido, donde lo único que les importa es la cantidad que produces, no les importa como te alimentas, ni cómo te sientes, tampoco tienes la oportunidad de levantarte a estirar las piernas. No puedes salir y dar una caminata, tienes que estar ahí todo el tiempo, confinado.
Y seguimos ese viejo consejo de nuestras abuelas "no hagas lo que no quieres que te hagan", por eso decidimos crear toda una nueva experiencia para las gallinas que producen huevos.